Hilos Tensores
¿Qué son los Hilos Tensores?
El Dr. Óscar Máyorga nos explica en qué consiste el procedimiento que se sigue para el lifting facial sin cirugía mediante el empleo de los hilos tensores, rusos o hilos mágicos en la clínica RegenBiocell Clinic de Albir.
Esta técnica es todavía joven (unos doce años) pero ya ha evolucionado bien y ha mejorado en los resultados desde el uso de hilos más largos y múltiples.
Hoy en día, es la única técnica ligera que da inmediatamente un efecto «lifting» digno de tal nombre, con un estiramiento de la piel del rostro. Otros nombres que se usan son hilos mágicos, hilos rusos, hilos tensores espiculados, hilos espiculados e hilos Silhouette Soft®.
Una vez más, el médico estético, o cirujano plástico que vaya a realizar el tratamiento, debe de haber sido perfectamente entrenado en estas técnicas y por supuesto, estar familiarizado con la anatomía de las áreas tratadas para evitar el riesgo de lesiones a los vasos, músculos de la piel o nervios.
La Aplicación de hilos tensores es una técnica no invasiva, es decir que no implica cirugía, que tiene un efecto lifting natural en la piel y consiste en la aplicación de hilos 100% biocompatibles y reabsorbibles, de forma intradérmica en diferentes zonas de la cara y el cuerpo, con el fin de tensar y reafirmar así como producir colágeno.
Existen hilos de nylon y polipropileno, no absorbibles, muy bien tolerados. Más recientemente, han aparecido en el mercado puntos de sutura absorbibles que se descomponen en aproximadamente 6 a 10 meses.
Los hilos tensores están ahí para restaurar la tensión en las áreas flácidas y/o caídas de la cara y el cuello gracias a la implantación de hilos dentados debajo de la piel. Se trata, en cierto modo, de obtener un efecto «lifting» sin cirugía.
Los hilos faciales estimulan a nivel interno la producción de colágeno y fibroblastos consiguiendo una nueva piel de aspecto elástico y saludable.

¿Para qué se utilizan los hilos rusos?
Es un tratamiento idóneo para los pacientes que buscan combatir la flacidez gravitacional, tensar la piel del rostro y cuello y devolver la firmeza al óvalo facial sin cirugía.
- La flacidez moderada del óvalo de la cara, papada, pliegues nasolabiales…son las zonas en las que mejores resultados obtenemos con este tratamiento.
- Los hilos son también interesantes para tratar el aspecto triste o el aspecto cansado debido a la flacidez de los pómulos o de las cejas.
- Además, los cuidados post tratamiento,son muy sencillos de seguir.
- Estos hilos crean una red sub-dérmica de soporte que aporta la tensión necesaria para conseguir el efecto lifting.
- El resultado es una piel más firme, con efecto lifting, más luminosa y rejuvenecida, preservando los rasgos y anatomía facial.
¿Cómo se colocan los hilos mágicos?
Los hilos tensores son insertados mediante una aguja,que hace de guía en el tejido hipodérmico.
Estos hilos tienen múltiples asperezas y se «aferran» bajo la piel «como el velcro» sin puntos de sutura.
Se colocan con una aguja fina que no deja cicatrices. Los tejidos así «enganchados» y tensados permiten restaurar el óvalo del rostro y reducir la caída o ptosis de los tejidos en las mejillas o el cuello, por ejemplo. También permiten levantar los pómulos o las cejas, lo que puede mejorar la dinámica de los ojos.
Al finalizar el procedimiento,se puede apreciar perfectamente el efecto.El paso de las semanas, produce una mejora general de la piel,potenciando el efecto mediante bioestimulación.
Esta técnica permite retoques y nuevas aplicaciones en cualquier momento sin interferir con tratamientos anteriores. De aplicación sencilla y rápida apenas requiere tiempo de recuperación, por lo que el paciente puede reincorporarse a su vida normal de forma inmediata.
